viernes, 18 de octubre de 2013

Y pasó...

Justo cuando piensas que no vas a volver a ilusionarte, que tu sonrisa no va a tener otro motivo perceptible debido a los errores del pasado, sucede. Aparece otra persona, que realmente te das cuenta de que estaba presente hace mucho tiempo más atrás… Y aparece el miedo; miedo a no salir ilesa de la locura que sabes que vas a cometer, miedo a que tus lágrimas vuelvan a tener nombre, miedo a que nada salga como esperas… Pero en eso consiste la vida, en arriesgarse, en vivir nuevos momentos que se convertirán en grandes recuerdos en el futuro, en aprovechar el tiempo. Y mientras pienso en estas palabras solo tengo a una persona en la cabeza, sí, la misma que anda rondando a todas horas, pero que difícilmente puedo evitar. Esa persona que hace que me duela la boca de tanto reírme con las tonterías que solo él hace, esa persona que consigue dirigir todos mis estados de ánimo, el que hace que el tiempo se pare cuando estoy a su lado y de repente, lo único que quiero es que ese momento dure para siempre.